lunes, 26 de mayo de 2014

Superar a Jauretche - El Desafío del Pensamiento Nacional

No es normal que escriba muy seguido aquí, aunque me gustaría.
Escribir como homenaje a Jauretche hizo que me extendiera, y al leer los diarios del 25 de mayo, me dieron ganas de sumar unas líneas más al homenaje.

Imaginaba luego de ver el recordatorio de parte de varios miembros del Instituto de Revisionismo Histórico Manuel Dorrego el domingo pasado en Miradas al Sur, que habría algo más para ver en los diarios de hoy.

Dejo como postre de cada semana la habitualmente brillante columna dominical del diario Tiempo Argentino escrita por Hernán Brienza. Pero hoy, al leer el título, ya no pude esperar. Además el título era picante.

Allí se pregunta si no ha llegado el momento para el Peronismo (nadie pide en política para los ajenos y era hora que declararas tu pertenencia de nuestro lado, Hernán) consiga, en tanto expresión principal del Pensamiento Nacional, superar, y tal vez traicionar a Arturo Jauretche.

Cuesta leer la palabra traición luego de que Eduardo Duhalde dijera alguna vez que el peronismo tiene un Día de la Lealtad y 364 de la traición. No lo comparto; asusta la mención. Por eso prefiero hablar de superación, a riesgo incluso de no interpretarte correctamente e invalidar el razonamiento siguiente.

Yo creo Hernán, que si los peronistas (y me permito incluir al resto del campo del pensamiento nacional) traicionamos a don Arturo Jauretche, habremos bajado definitivamente nuestras banderas. Aunque no creo que sea tan literal tu posición.

Espero no estar interpretándote mal si comparto que debemos encontrar un autor, pensador o guía que lo supere, y nos sirva de referencia con una versión adaptada al siglo XXI a todos quienes adscribimos a dicha corriente, mayoritariamente peronistas y kirchneristas, por lógicas razones.

El mismo Jauretche como revolucionario que fue, sabía y aceptaba, que toda revolución se lleva puestos a los padres de las mismas.
Quienes adherimos al pensamiento nacional adscribimos también al revisionismo histórico, que nos enseña a ser revisionistas incluso de nuestras propias obras. Me gusta más la revisión permanente, que la traición, porque va de suyo esa superación que marqué antes.

De todas formas, me parece que algo no fue tomado en consideración.
Jauretche SIEMPRE escribió durante épocas de RESISTENCIA.
En la década infame y durante la resistencia peronista. Por ello fue como puse en una nota anterior un revolucionario.

En cambio ahora, somos gobierno. La forma de escribir y de pensar es diferente como gobierno ((in)formativa, defensiva) que como resistencia (confrontativa) como le tocó a él, que incluso es distinta a la de cualquier oposición democrática.

Además, hay otras prioridades. Como expresaste tiempo atrás en otra editorial, lo más importante para el peronismo de la hora es pensar de qué manera conservar el poder. Aunque tal vez, esta idea, y la del nuevo revisionismo deban ir juntas y sean parte del mismo fin.

Es cierto que en tal caso, los ideales y los paradigmas, deben mantenerse. Pero tal vez, por estar muy preocupados en defender el modelo nacional y popular, no supimos notar esta necesidad de primero mantener el poder, y luego enamorar a la sociedad con un pensamiento nacional que evolucione y se adapte a los tiempos que corren, y que sea abrazado por el pueblo,  recordando, pero a la vez superando, las consignas que nos legó Jauretche.

Si es esto lo que estuviste pensando o tratando de expresar, quiero decirte una vez más, que creo que ves más allá que varios de nosotros; en ese sentido sos un adelantado.
(no me extrañaría; no dudo que algo parecido habrá pensado Cristina Fernández al elegirte para ser el primer entrevistador de su ciclo de charlas).

Hernán, a pesar de haberte visto pocas veces, en cada oportunidad que me fue posible te he expresado cuánto te aprecio. Afecto que nace de leer en tus columnas, la palabra justa y que se refuerza en el hecho de ser contemporáneos, lo cual me parece que me permite apreciar mejor esa calidad.

Por ello me permito plantearte un desafío. Y creo que es el mejor homenaje que le podemos hacer hoy a Jauretche.

Me parece sinceramente (y con esto cierro) que sos el más adelantado pensador nacional y popular de la nueva generación.
Y que por tal motivo sos el más adecuado para hacer punta en llevar adelante la tarea que pedís.

No serán los políticos, enfrascados en la tarea de la gestión quienes puedan llevar adelante la tarea. Van a necesitar un equipo que colabore con semejante “tormenta de ideas”. Sos el más adecuado para ser la guía.
Y no tengo dudas de que el peronismo tiene usinas de trabajo que te pueden acompañar.
Si te animás a tomar este desafío, me pongo a tu entera disposición.


(Voy a usar una digresión típica de Brienza para incluir aquí el último homenaje a Jauretche de esta serie. Don Arturo decía que si miráramos el planisferio de manera invertida, el mundo se vería diferente. El Instituto Geográfico Nacional comenzó a hacerlo (obtuve una copia en la reciente Feria del Libro). Copio la imagen del mismo a continuación, a la espera de la publicación definitiva en el sitio web del organismo, a quienes aprovecho para felicitar con enorme orgullo argentino, por tal excelente idea).


No hay comentarios:

Publicar un comentario